No hay posiblemente mejor manera de celebrar el Día Europeo de la Arqueología, que se lleva a cabo este fin de semana, que poniendo en marcha una escapada a la comarca de Aracena, en pleno corazón del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche, un espacio de amplias dehesas salpicadas de alcornoques, encinas y castaños que da cobijo a un buen número de pueblos de arquitectura serrana, con casas encaladas y calles empedradas. Se trata de una zona donde practicar senderismo o hacer rutas en bicicleta o a caballo, además de disfrutar de un interesante patrimonio histórico-artístico y de una historia que se remonta a los primeros tiempos de la Humanidad y que conserva importantes vestigios de las épocas romana, musulmana o de la Edad Media. Y en el que podemos alojarnos en un hotel con spa en la sierra de Huelva.
La principal actividad programada para este fin de semana es una visita guiada el domingo 19 a partir de las 12:00 horas al yacimiento de época romana de Turóbriga, a poca distancia en coche de nuestro hotel de cuatro estrellas en Aracena. Se trata del principal enclave de este periodo que puede contemplarse en la provincia de Huelva. La visita contará también con una taller didáctico para los más pequeños bajo el título ‘Un día en la Antigua Roma en Turóbriga’ para que conozcan la importancia que ha tenido en España la herencia romana. El lugar de encuentro para quienes acudan será la ermita de San Mamés.
La visita nos permitirá observar cómo Turóbriga estaba dotada de una muralla, más como símbolo de prestigio que con función defensiva, que separaba el campo de la ciudad. Contaba, al menos, con dos puertas, una próxima al foro, en la zona Sur, y otra junto al Campus, en la parte norte. En el exterior se ubicaba el Campo de Marte, un gran espacio destinado a la práctica de actividades deportivas, luchas de gladiadores, asambleas, campamento de las tropas… y lugar en el que se rendía culto a Marte y sede del Colegium Iuvenum, asociación de jóvenes de la ciudad.
Creada como punto desde el que establecer un control generalizado sobre una zona conflictiva de la Baeturia Céltica, poblada por los pueblos turdetano y ‘baetúrico’, el momento de mayor esplendor y consolidación de la ciudad se produce durante los gobiernos de Trajano y Adriano. Su declive, mientras, llegará a mediados del siglo III d.C., en época de Los Severos, siendo abandonada de manera paulatina y sirviendo varios de sus edificios como cantera para la construcción o ampliación de las numerosas villas documentadas en sus inmediaciones. Más tarde también se usarían sus piedras para la construcción del Castillo de Aroche y de la ermita de San Mamés.
Todo el recinto interior estaba ocupado por caseríos, localizándose también varias viviendas señoriales decoradas con ricos materiales y objetos lujosos (Casa de la Columna, Casa Norte, Casa del Peristilo). En la zona central se hallaba el Foro, el auténtico corazón del centro urbano y desde donde se gobernaba y en el que se desarrollaban las actividades más importantes. Ya en el exterior, pueden contemplarse los restos de las necrópolis, lugares de enterramiento, junto a las puertas Norte y Sur.
Aunque no se trate de un enclave arqueológico propiamente dicho, también podemos participar en las visitas guiadas que los fines de semana se organizan en el Hotel Convento Aracena & Spa, una manera de acercarnos a los espacios y a los hábitos de vida de la comunidad religiosa que habitó este lugar cuando, allá por el siglo XVII, era un convento de la orden dominica. Convertido hoy en un lujoso hotel de cuatro estrellas en Aracena, conserva, tras una respetuosa restauración, el encanto de aquel tiempo.
Durante el recorrido conoceremos algunas de las leyendas y anécdotas que guarda este emblemático lugar de Aracena, situado en pleno centro histórico y a los pies del castillo y la iglesia prioral que, durante siglos, han vigilado desde lo alto del cerro el deambular diario de los aracenenses. La cita incluye visitas a la iglesia y su sacristía, el jardín, el claustro con sus pozos, su campana, el costurero y con multitud de testimonios curiosos e inquietantes, el patio de los naranjos y el mirador, que nos proporcionará una visión de conjunto del edificio.
El castillo que mira desde arriba a nuestro hotel de cuatro estrellas con spa en Aracena fue construido a mediados del siglo XIII y se mantuvo en uso hasta principios del siglo XVI, cuando perdió su función militar. Consta de patio de armas y alcázar, separados por una muralla donde destaca la Torre Mayor, con un aljibe cada uno de ellos para garantizar el suministro de agua. La Torre Mayor se alza en la zona más elevada del cerro, siendo concebida como último reducto de la defensa, capaz de resistir incluso después de haber sido capturada la fortaleza. Se integraba en el conjunto de fortificaciones conocidas como Banda Gallega, destinadas a defender el Reino de Sevilla de los ataques de las tropas de Portugal o de las Órdenes Militares asentadas en el sur de Extremadura.
Y si nos quedamos con más ganas de historia y ya hemos disfrutado lo suficiente de nuestro alojamiento con spa para toda la familia en Huelva, podemos acercarnos a la localidad de Almonaster la Real para conocer su mezquita, templo musulmán levantado en un entorno rural que mejor se conserva de España. Erigida durante el reinado de Abd al-Rahman III, un documento de 1583 se refiere a ella como “iglesia antigua de moros”. Se cree, por los restos reutilizados en su construcción, que antes hubo en ese mismo lugar un edificio romano, trasformado después en iglesia visigodo-cristiana. La mezquita presenta dos espacios diferenciados, el shan o patio abierto para las abluciones, y el iwan o sala de oración cubierta.
Es tal el esplendor patrimonial de esta zona la sierra onubense, donde contamos con alojamientos rurales para toda la familia en Aracena, que podemos llevar a cabo un paseo por su cultura árabe, adentrarnos en la ruta de los castillos conociendo algunas de las fortificaciones bajomedievales que formaron parte de la denomina Banda Gallega o seguir los pasos de la ruta del rey poeta Al Mutamid.
